EL SUEÑO DE JUANA
La otra noche tuve un bonito sueño. Soñé que ya era mayor y que enseñaba como religiosa a un grupo de niñas en una escuela. Entonces de pronto observé que mis alumnas giraban sus cabecitas hacia la ventana y murmuraban entre ellas: -¡Hay un señor ahí fuera!
Salí asustada rápidamente del aula para ver quién era y ¡resultó que ese señor era Guido! ¡Menuda sorpresa!
Creo que lo más divertido fue ver a Guido de adulto con esa barba y bigote. Me recordó un poco a Tío Miguel.
Ojalá algún día pueda ser maestra y religiosa. Es lo que más deseo.
Comentarios
Publicar un comentario